Los activistas homosexuales pueden objetar la sugerencia de que sabemos lo que les conviene. «Guárdense su compasión. ¡Yo quiero ser así!» podrían decir. Bien, usted puede comportarse de esa manera, pero no espere que el resto de la sociedad lo apruebe.
Contras del Matrimonio Homosexual
Los activistas homosexuales preguntan: «¿Cómo podría la aprobación gubernamental del matrimonio homosexual dañarle a usted? La mayoría de los conservadores han fracasado en contestar esta pregunta, pero no es difícil prever las siguientes consecuencias negativas:
– Los impuestos sobre la renta aumentarán para compensar los beneficios de impuesto al matrimonio dados a parejas homosexuales y para pagar por los costos sociales resultantes del aumento en la ilegitimidad. Nosotros proporcionamos beneficios a las parejas casadas porque ellos producen y cuidan de los niños. ¿Por qué las parejas homosexuales deben tener los mismos beneficios que hombres y mujeres que crían hijos? Más aún, proporcionar incentivos financieros a las uniones homosexuales podría ser doblemente contraproducente. Primero, los contribuyentes estarían subsidiando, y de esta manera fomentando un comportamiento destructivo. Segundo, luego nosotros pagaríamos los resultados de ese comportamiento en el aumento de costos médicos y sociales.
– Los impuestos de seguridad social se incrementarán (o los beneficios decrecerán) para pagar por los beneficios de ayuda al sobreviviente a las «viudas» y «viudos» homosexuales.
– Las primas de seguros médicos aumentarán para paliar los altos costos médicos asociados con la homosexualidad (ej.: SIDA, cáncer del colon, hepatitis y otras enfermedades) las cuales probablemente aumentarán si aprobamos el matrimonio homosexual. Las primas médicas aumentarán aún más si las compañías de seguros son obligadas a cubrir tratamientos de fertilidad para parejas lesbianas (¡de seguro habrá algún juez en alguna parte que ordenará esto!)
– Los beneficios de los empleados serán reducidos a medida que los patronos sean obligados a extender sus limitados dólares de beneficios para incluir a la pareja de los homosexuales. Los limitados dólares de beneficios dados a los homosexuales deberán venir de alguna parte, serán quitados a todos los demás – hasta a las parejas casadas que estén criando hijos.
– A las parejas homosexuales se les dará preferencia legal para adoptar debido a su incapacidad para procrear. En otras palabras, a los homosexuales no se les darán derechos iguales, sino súper derechos – derechos que sobrepasarán los derechos suyos como ciudadano. Trágicamente, los niños serán tratados como trofeos que, en efecto, validarán las relaciones homosexuales.
– Sus hijos serán adoctrinados, con o sin su consentimiento, para aceptar el homosexualismo y los matrimonios homosexuales como el equivalente moral y social del comportamiento heterosexual y del matrimonio (ya estamos viendo esto en escuelas, especialmente en California y Massachusetts). ‘Y quieren hacer lo mismo en Colombia’.
– Su sitio de trabajo intentará adoctrinarle a usted para estos mismos fines – y si usted rehúsa, perderá su trabajo o no será considerado un «jugador de equipo.» (Esto ya está ocurriendo mediante el entrenamiento en «diversidad» en muchas compañías; se volverá universal si el matrimonio homosexual se convierte en ley).
– La libre expresión y los derechos religiosos serán restringidos a medida que la oposición a la homosexualidad sea criminalizada como «discurso de odio» (como lo es ahora en Canadá y Suecia). Esto debería despertar a las personas religiosas que creen erróneamente que no deben involucrarse en la política. ¡La política afecta su habilidad de practicar su religión! Una vez que el matrimonio homosexual sea aprobado, no pasará mucho antes de que usted sea multado o encarcelado por expresar cualquier oposición a la homosexualidad. Gente con convicciones morales religiosas será considerada peor que racistas.
– El gobierno y su intrusión crecerán como resultado de los cambios que acabamos de revisar. Esa es otra razón por la que los liberales quieren los matrimonios homosexuales – significa tener un gobierno más grande. Ellos requerirán de más programas de gobierno para arreglar el desastre causado por la destrucción de la familia, y más regulaciones de gobierno para asegurar que su nueva moralidad políticamente correcta le sea impuesta a usted, a sus hijos, y a su lugar de trabajo.
Estos efectos negativos son verdaderamente significativos, pero como hemos visto, el impacto más dramático será sobre las generaciones futuras. Esto es porque el matrimonio homosexual cambiará la manera en que las generaciones futuras pensarán acerca de la homosexualidad y el matrimonio mismo. Irónicamente, esto también podría dañar a los homosexuales…
David Kupelian escribe muy bien sobre esto en su libro, The Marketing of Evil:
«Hemos olvidado lo que es el amor como sociedad, porque apoyar y justificar la homosexualidad no es amor verdadero, así como glorificar el beber no ayudará al alcohólico o celebrar, el fumar no ayudará a eliminar el cáncer de pulmón. . . La posición de mayor amor hacia otros que se debe tomar, es no servir como facilitadores de compulsiones autodestructivas e inmorales, sino permanecer en paciente pero firme oposición”.
¿Por qué no permanecemos en paciente pero firme oposición? Porque es mucho más fácil aceptar sin criticar las medias verdades dichas por los activistas homosexuales, y luego tener lo que parece ser compasión por ellos dándoles lo que quieren. Pero eso no es una verdadera compasión. Jay Budziszewski observa que la verdadera «compasión debería hacernos visitar al prisionero, no darle de beber al alcohólico, ayudar a la niña embarazada a prepararse para tener al bebé, y exhortar a los homosexuales jóvenes a vivir castamente. Pero es mucho más fácil olvidar al prisionero; darle un trago al borracho, enviar a la muchacha al abortista, y decirle al muchacho que se rinda. La falsa compasión da mucho menos trabajo que la verdadera”.
Gente está siendo dañada por nuestra falsa compasión que promueve la homosexualidad. Tan falsa compasión no sólo atrae a más jóvenes a experimentar la homosexualidad, sino que hace la lucha más difícil para los homosexuales que les gustaría dejar ese estilo de vida. Como George Gilder señala: »Algunos homosexuales… No están siendo ayudados por el agresivo movimiento de liberación gay, el cual quiere sacarlos del closet a la calle en donde puedan ser explotados por la brigada de los derechos gay. Ellos quieren vivir tranquila y productivamente y son lo suficientemente conscientes para no querer infligir su problema a otros». Ciertamente, promover comportamientos problemáticos no tiene nada de compasivo.
Los activistas homosexuales pueden objetar la sugerencia de que sabemos lo que les conviene. «Guárdense su compasión. ¡Yo quiero ser así!» podrían decir. Bien, usted puede comportarse de esa manera, pero no espere que el resto de la sociedad lo apruebe. Eso sería el desamor. Promover la homosexualidad con la aprobación gubernamental del matrimonio homosexual podría no sólo dañarle a usted, sino que también dañaría a nuestros hijos y a nuestro país.
Gracias a Allaboutlove
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